Soy conversador, me encanta hablar con todo el mundo (incluyendo a los pasajeros). Para mi, conversar durante un viaje ayuda a que el viaje pase más rápidamente. Sin embargo, hay temas que nosotros como conductores, debemos evitar a toda costa. Digo esto porque son temas muy sensibles, que en caso de no manejarlos adecuadamente, pueden ser controversiales, pues cada quien tienen variadas opiniones y no todo el mundo acepta puntos de vista distintos a sus propias ideas.
1. Política.
Es el primer tema a no tratar en esta lista, pues nos afecta a todos. Muy especialmente en estos tiempos de cambios de gobierno, corrupción, elecciones en Estados Unidos, etc. Todo el mundo es un sabio en cuanto a este tema (desde su propio punto de vista), hay muchas tensiones e intereses involucrados. Hay personas que disfrutan tener discusiones acaloradas en torno a la política si no estás de acuerdo con sus opiniones. Un pasajero que te pregunte: ¿de cuál partido eres? ¿por quién votaste? ¿por quién vas a votar?, está preparando una fogata en medio del sol de verano y necesita que tú la enciendas para poder justificarla.
Es más probable que tu respuesta sea el
principio de una acalorada discusión que de una placentera plática. Es sabio
evitar estos temas. Podrías salir de esa incomodidad respondiendo cosas
como: El voto es secreto, no me decido todavía, lo estoy consultando, o una
combinación de todas.
Mi respuesta sería: - Todavía no he tomado una decisión al respecto, aprovecho las oportunidades que me da este trabajo para consultar con personas como usted; y le rematas con la siguiente pregunta: ¿Cuál es su punto de vista en el presente escenario político/social?
La respuesta que dé el pasajero será tu vía de
escape o tu punto de apoyo a la pregunta anterior. Usa la respuesta del pasajero con sabiduría. Para que
esto funcione todo lo que digas a continuación debe ser bien razonado y sin
pasiones. Que el pasajero sienta que estás haciendo una reflexión/introspección
profunda y favorable a su punto de vista (aunque no sea cierto), que sienta que te iluminó con su sabiduría.
Ten pendiente que no sabes quien es tu pasajero. No sabes si es de un partido político, si es candidato o si es familiar o amigo cercano de un candidato o funcionario.
Hablando de estos últimos (Progress, Feministas o LGBTQI+), estos generalmente traen el tema a colación tratando de ver cual es tu posición respecto a ellos y generar una discusión que tratará de cambiar tu punto de vista hacia el de ellos, tienen sed de ser aceptados, entendidos, apoyados, pero en su desesperación quieren imponerse o quieren generar conflictos (en la mayoría de los casos). Como dije anteriormente tu no vas a cambiar la forma de pensar de nadie y nadie va a cambiar la tuya en un viaje de 15 minutos.
La mejor respuesta que he encontrado para este tipo de pasajeros es:
“No estoy de acuerdo con su punta de vista, pero respeto su individualidad, viva su vida como usted quiera sin causarle daño a nadie y respetando mi vida y mi punto de vista”. Ellos inmediatamente harán silencio pues ellos exigen y demandan mucho respeto e “inclusión”. Entonces en ese preciso momento de esa respuesta, debes buscar otro tema y ellos no deben volver a intentar ponerte ese tema.
4. Pasajeros anteriores.
¿Por qué debes evitar este tema? Una razón es que tu actual pasajero posiblemente tenga patrones de conducta o malas costumbres similares al pasajero anterior, es posible que haya hecho algo similar al relato que le piensas contar, es posible que tu actual pasajero piense que tu peor pasajero tenía razón (al igual que él), pues podría crear una psicología de colmena (todos los pasajeros en contra de todos los conductores).
Hay temas que es mejor evitar. Hay pasajeros que solamente quieren "romper el hielo" y entretenerse con tus historias, si la conversación se mantiene desde lo sanamente razonable, de manera respetuosa y adulta, no debe haber mayores problemas; hay otros pasajeros que quieren una terapia gratuita o un entretenimiento forzado más allá de lo justo y lógico. No eres psicológo, no eres terapista, no eres narrador, no eres cuentista, no eres comediante.
Eres un conductor.
Tu responsabilidad es llevarlo desde el Punto A hacia el Punto B.
Pregúntale: ¿Por qué quieres saber?, ¿Le ha pasado algo desagradable usando esta aplicación?, ¿Quiere usted ser conductor?
Una respuesta que saca el tema de cuajo es (yo la uso mucho):
“Todos mis clientes/viajes han sido estupendos”.
Eviten estos temas incómodos, tal vez no tendrás buenas calificaciones pero te asegurarás de que no te den malas calificaciones producto de meterte en conversaciones incómodas.
Dios les proteja.
Nos vemos en las calles de la ciudad.
¡Cabiar Somos Todos!